La muerte de Manuel Fernández Giménez

Antonia y Luisa, la madre y la tía de Manuel Fernández Giménez, nos cuentan por qué están convencidas de que su muchacho fue asesinado, por acción y omisión, a manos de miembros del personal de la cárcel de Albocàsser (Castellón II); expresan sus sentimientos al respecto; explican lo que han hecho en busca de justicia, y lo mal que les han respondido el Estado y su aparato judicial.

Seis años y medio después del triste suceso, aún no ha salido el juicio, y la fiscalía se ha inhibido. El procedimiento continúa porque la familia de Manuel se mantiene como acusación particular, con ayuda de dos abogadas y un perito forense contratado, y el apoyo de Familias frente a la crueldad carcelaria.

Si queréis contribuir a afrontar los gastos, apoyad el proyecto de goteo de FFACC: https://www.goteo.org/…/ffacc-familias-frente-a-la…

Más información sobre el caso

Apoyo a la denuncia de torturas en la cárcel de Albocàsser

El Grup de Suport a Persones Preses de València ha sacado una pegatina, un cartel y un fanzine para apoyar la denuncia por torturas a personas presas presentada por la asociación Familias Frente A la Crueldad Carcelaria contra carceleros de la prisión de Castellón II. También el grupo Fuera Del Orden, de Alcalá de Xivert (Castellón), ha elaborado un fanzine con el mismo propósito. Y el programa de radio Tokata y Fuga ha hablado igualmente de ello.

Fanzine del Grup de Suport a Persones Preses de València 

Fanzine de Fuera Del Orden

Tokata Y Fuga 16-XI-2019. Torturas En Las Cárceles Y Comisarias, Brutalidad Policial En Las Calles

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Torturas en la cárcel de Albocàsser (Castellón II) en agosto y septiembre

La asociación FFACC (Familias Frente A la Crueldad Carcelaria) se ha empeñado en denunciar pública y judicialmente las torturas que sufrieron entre el 30 del pasado agosto y el 16 de septiembre un número indeterminado de presos –quizá 10 o 12– de los que cuatro han denunciado ya ante el Juzgado de Guardia. Piden apoyo a su lucha contra la tortura, la idefensión de las personas presas y las mentiras y tergiversaciones de los defensores de la crueldad institucionalizada. A continuación, un resumen de lo sucedido y de la valoración de la asociación. Siguiendo los enlaces de abajo del todo se puede encontrar un informe bastante más completo y una serie de documentos relevantes.

TORTURAS EN LA CÁRCEL DE ALBOCÀSSER

La Asociación Familias Frente A la Crueldad Carcelaria está formada por familiares y amigos de personas presas. Su finalidad es defender los derechos de quienes han tenido la desgracia de entrar en la cárcel, denunciar públicamente todas las situaciones que vulneren esos derechos y hacer todo lo posible para corregirlas. Queremos dar a conocer una de esas situaciones, que se dio en la cárcel de Albocàsser entre finales del pasado mes de agosto y mediados del de septiembre, y señalar una serie de aspectos en que, en nuestra opinión, se ha atentado gravemente contra la integridad y la dignidad de más de 10 personas presas en esa cárcel sometiéndoles a tratos crueles, inhumanos y degradantes que en gran parte se pueden calificar con toda propiedad como torturas.

El 31 de septiembre varios medios de comunicación se hacían eco de las informaciones de algunos sindictos de funcionarios de prisiones y especialmente de la nota de prensa del sindicato ACAIP. Según el relato publicado, el viernes, 30 de agosto de 2019, sobre las seis de la tarde, en el módulo 3 de la cárcel de Albocàsser (Castellón II), un interno “agredió a un funcionario, le golpeó en la cabeza con una escoba, hasta el punto de partir el palo, y trató de apuñalarlo con trozos de madera del mismo”, este preso y otro de sus compañeros “se atrincheraron en el patio del módulo y comenzaron a amenazar a los funcionarios con matarlos y a tirarles objetos” alentando al resto de internos a “secundar la agresión” y creando “una situación de máxima gravedad dado que podría derivarse en un motín”, aunque desde Instituciones Penitenciarias “han asegurado que no hubo ningún intento de motín y que el resto de internos no secundó los hechos”. Entre 15 y 20 funcionarios “tuvieron que acudir al módulo y entre todos lograron controlar la situación”, aislando a esos dos internos, “encerrando en el comedor al resto y subiéndoles escalonadamente a sus celdas”. Igualmente, se afirma que “el trabajador agredido tuvo que ser trasladado al hospital con lesiones de diversa consideración”, pero también que “según fuentes penitenciarias, el trabajador no requirió hospitalización y se encuentra en buen estado”.

Por encargo de nuestra asociación, alertada por la madre de uno de los presos afectados, el abogado Lisandro Giordani González fue a visitar cuatro de los presos implicados, cuya versión de los hechos resulta bastante diferente de la anterior. Los cuatro manifestaron haber recibido verdaderas palizas por parte de funcionarios de prisiones, a base de porrazos, puñetazos y patadas, incluso en la cabeza. Dos de ellos fueron llevados a aislamiento el mismo día 30 después de ser terriblemente apalizados —hasta el punto de perder uno de ellos el conocimiento— por gran número de funcionarios, en presencia del resto de los internos del módulo 3, que, según la versión de todos los internos denunciantes, se limitaron a protestar verbalmente, pero no hicieron nada más ni se resistieron a cunplir las órdenes de los funcionarios. Los otros dos fueron conducidos a una celda de aislamiento al día siguiente y fueron golpeados en varias ocasiones con porrazos patadas y puñetazos, insultados, amenazadsos y vejados. Los cuatro permanecieron en celdas de aislamiento más de quince dias, sin agua corriente, sin sus pertenencias personales y sufriendo en repetidas ocasiones el maltrato descrito. Fueron objeto también de expedientes disciplinarios, de regresión a régimen cerrado o primer grado de tratamiento desde el segundo grado o régimen ordinario en que se encontraban y trasladados a otras cárceles. A uno de ellos al menos se le privó bruscamente del tratamiento psiquiátrico que estaba recinbiendo lo que le provocó un severo síndrome de abstinencia. Aseguran que cierto número de sus compañeros de módulo —quizá unos diez o doce— sufrieron un trato parecido.

Resultan considerablemente divergentes el relato de los “hechos” publicado y el que se hace en las denuncias que se han presentado en los juzgados de guardia, basadas en los testimonios de los presos afectados, concordantes pese a haber sido recogidos individualmente, encontrándose ellos aislados, incomunicados entre sí y sin haber tenido la menor oportunidad de ponerse de acuerdo. Dejando aparte la desproporcionada violencia y la crueldad empleadas por los funcionarios, esos relatos se contradicen, sobre todo, en lo que atañe a la supuesta resistencia opuesta por algunos de los reclusos frente a la actuación de los funcionarios de prisiones con posterioridad a la agresión con el palo de escoba. Y lo mismo en lo que toca a la incitación al motín por algunos de ellos y al supuesto intento de motín e insubordinación subsiguientes de un número aún mayor, aunque impreciso de reclusos. Resistencia e incitación al motín que, en el relato de los presos sencillamente no existió. Pero, pasara lo que pasara, nos consta que —además del castigo reglamentario y la probable denuncia penal— al menos cuatro personas han sido maltratadas y amenazadas como represalia y escarmiento por lo supuestamente sucedido el día 30 de agosto, lo cual constituye tortura, si hacemos caso de la definción de la misma contenida en el artículo 1 de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes: “A los efectos de la presente Convención, se entenderá por el término ‘tortura’ todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores y sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores y sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otrta persona en ejercicio de funciones públicas, a instigación suya o con su consentimiento o aquiescencia.”

Y también es necesario tener muy en cuenta que el proceder de ACAIP y de los medios que han publicado estas noticias atenta gravemente contra el derecho a la presunción de inocencia de las personas presas interesadas, al difundir un relato, considerablemente sesgado y tergiversado por las ideas fijas que animan las campañas mediáticas de los sindicatos de carceleros a favor de sus intereses “laborales”, relato que presenta como culpables de unos hechos delictivos que no han sido convenientemente calificados, documentados y mucho menos probados a unas personas que, desde otro punto de vista, se pueden considerar, más bien, como víctimas de los mismos que les denuncian. Pero el caso es que quienes difunden esa versión de los “hechos” exagerada y distorsionada son agentes de la autoridad pública y su comportamiento va contra la ley. Por ejemplo, contra lo que dicta la Directiva (UE) 2016/343, de 9 de marzo de 2016 del Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea, en su artículo 4: “Los Estados miembros adoptarán las medidas necesarias para garantizar que, mientras ni se haya probado la culpabilidad de un sospechoso o acusado con arreglo a la ley, las declaraciones públicas y las resoluciones judiciales que no sean de condena no se refieran a esa persona como culpable.” Ese relato de lo supuestamente sucedido el 30 de septiembre fue publicado en varios medios de comunicación el día 31, antes de que se hubiera comunicado oficialemente el inicio de ningún expediente disciplinario o interpuesto denuncia penal alguna, aunque mucho nos tememos que las acusaciones formales coincidan casi exactamente con la versión publicada. Así que nos veríamos ante un juicio paralelo, extralegal, y no solamente en lo que se refiere a la publicidad, ya que los acusados ya han sido condenados y castigados con aislamiento, malos tratos físicos y psicológicos, sanciones disciplinarias, regresiones en el grado de tratamiento con el correspondiente endurecimiento de sus condiciones de vida, traslados por los que se les aleja de su entorno social y familiar, pérdida de sus pertenencias personales, alteración injustificada y punitiva del tratamiento psiquiátrico, etc. Acusados, juzgados, condenados y castigados sin garantía alguna, en una situación de abrumadora inferioridad y total indefensión.Acusados, juzgados, condenados y castigados, en una situación de abrumadora inferioridad y total indefensión.

Porque todo lo expuesto hace pensar que los funcionarios penitenciarios responsables de los abusos que estamos denunciando han hecho caso omiso de las instrucciones dirigidas a los directores de prisiones en la orden de servicio sobre el “deber legal parte de lesiones” de la Dirección General de Ejecución Penal y Reinserción Social dependiente de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, de fecha 1 de julio de 2019 y recientemente publicada. Indicaciones en el sentido de “ejercitar la labor penitenciaria en el respeto más escrupuloso a la legalidad”, para “erradicar la duda sobre la existencia de posibles abusos y desviaciones de poder por parte de quienes ejercemos la función pública” además de cumplir “la legalidad vigente y las indicaciones del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura”. De manera que sería necesario comprobar si han sido remitidos por la dirección del centro penitenciario de Castellón II al Juzgado de Guardia competente los partes de lesiones que en cumplimiento de la Ley de Enjuiciamiento Criminal hubiera debido elaborar el médico responsable, acompañadaos de los “partes de hechos e informes adicionales”; si el director ha acordado “la realización de actuaciones tendentes a esclarecer lo sucedido” y ha remitido al Juzgado de Guardia “copia de lo actuado” y de las declaraciones de los internos afectados; y, por último, si se ha informado de todo ello al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria.

Para nosotras es evidente que no se ha respetado la legalidad vigente ni los principios elementales de la dignidad humana y que la duda sobre la existencia de abusos y desviaciones por parte de los funcioarios de la cárcel de Albocàsser responsables está muy próxima a convertirse en certeza. Nos han llegado, además, una y otra vez, por parte de personas presas, familares y allegadas de las mismas, informes de que en la cárcel de Albocàsser se infieren rutinariamente a las personas presas desde hace mucho tiempo toda clase de tratos crueles, inhumanos y degradantes. Así pues, queremos denunciar públicamente, tal como lo hemos hecho judicialmente, lo que para nosotras son gravísimos abusos de poder y tratos crueles, inhumanos y degradantes inferidos a personas presas por funcionarios de prisiones. Nos proponemos hacer lo necesario para sostener esta denuncia hasta las últimas consecuencias, tanto públicamente como en el terreno judicial.

Familias Frente A la Crueldad Carcelaria

La madre de Jonathan Martín González, torturado en la cárcel de Brians II, teme por su vida

Francisca González Caro es la madre de Jonathan Martín González, un muchacho de 31 años, padre de una hija, que ya lleva ocho en la cárcel, aunque entró para cumplir seis, por pequeños delitos relacionados con su toxicomanía. A finales de agosto, Francisca se enteró de que su chaval estaba sufriendo malos tratos en el Departamento de régimen cerrado (DERT) de la cárcel Brians II, donde había sido encerrado por una acusación falsa de agrsión a otro interno. Le metieron de malas maneras en una celda sucia de excrementos, donde le tuvieron encerrado varios días sin sus pertenencias personales, practicamente desnudo,  y le dieron un colchón con chinches, por los que fue picado, y tuvo teniendo que recibir un tratamiento para librarle de ellos. Jonathan les contó a sus padres que no podía vivir en esas condiciones y que tenía deseos de suicidarse.

Sometido a esa situación degradante, Jonathan acabó por prenderle fuego a una sábana, reivindicando que lo sacaran de ella. Los carceleros le dieron una paliza, en la que llevó la iniciativa uno de mayor rango al que llaman «Don Óscar, el cursi». Le dió tales puñetazos que le rompió un diente y le desencajó la mandíbula. Después fue inmovilizado en una cama «sujección mecánica» donde le tuvieron atado más de doce horas, sin desatarle para hacer sus necesidades, de manera que se las hizo encima. Todavía tiene insensible una mano, a causa delos golpes y de las ataduras. No le han llevado al hospital ni le han hecho parte de lesiones.

Tanto Jonathan como su madre, han denunciado lo que ha pasado. Francisca, que sufrió un ataque de nervios en el locutorio de comunicaciones, al contarle su hijo lo que le estaba pasando, no ha parado de moverse desde que se enteró de lo que le estaba pasando a su hijo, denuciándolo en algún medio de comunicación, en las redes sociales, en la radio y donde ha podido. La directora de Brians II le aseguró no tener constancia de lo sucedido. A Jonathan le amenazaron varias veces con nuevas palizas y «sujecciones mecánicas» si seguía denunciando. Fue trasladado a la cárcel de Quatre Camins, precisamente cuando su abogada había concertado cita para hablar con la directora de todo el asunto. Después, al regresar a Brians II, ha vuelto a ser agredido por el mismo carcelero, llamado Óscar, y trasladado a Sevilla, a un juicio. Su madre ha estado sin noticias suyas casi dos semanas, sufriendo una angustia terrible, pues teme por la vida de su hijo y piensa que los carceleros podrían matarle, como sabe que han hecho con otras personas presas.

En el programa de radio que ponemos a continuación, a partir del minuto 42:40, nos cuenta Francisca lo que está pasando y cómo le está haciendo frente. Y hay una grabación donde el mismo Jonathan relata lo sucedido. En el misma programa hablan la madre y la tía de Manuel Fernández Jiménez, que les fue entregado muerto por la cárcel de Albocàsser el año pasado, presentando su cadáver signos de violencia. Preparamos también un post de actualización sobre ello.

Tokata Y Fuga 27-X-2018. Tortura Y Muerte, Muerte Y Tortura, Hasta Que No Haya Cárceles

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Testimonio de una madre sobre las torturas que está sufriendo su hijo en el Departamento de Régimen Cerrado de la cárcel de Brians II (Barcelona)

En estas imágenes, que hemos encontrado en facebook, una madre nos cuenta las torturas, amenazas y trato degradante que está sufriendo su hijo en el DERT (Departemnt de Rêgim Tancat) de la cárcel de Brians II, en Barcelona. La compañera ha denunciado en el juzgado de guardia lo que le están haciendo a su hijo y nos pide que difundamos el vídeo todo lo posible.

Presentación del informe de la CPDT sobre torturas en el Estado español en 2017 y charla sobre aislamiento y muertes en prisión

Presentación en Gasteiz del último Informe Anual de la CPDT sobre La Tortura en el Estado Español, por César Manzanos, sociólogo, miembro de Salhaketa Gasteiz. Y charla sobre aislamiento carcelario y muertes en prisión, por Pablo Jiménez, de la Asociación Libre de la Abogacía de Zaragoza y Silvia Encina, Abogada, integrante de Salhaketa Gasteiz, y compañera de Familias Frente a la Crueldad Carcelaria.

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La tortura en el Estado español en 2017: informe de la Coordinadora para la Prevención y Denuncia de la Tortura

Por decimocuarto año consecutivo, la Coordinadora para la Prevención y Denuncia de la Tortura (CPDT) presenta su informe anual sobre los casos de tortura, malos tratos y muertes bajo custodia conocidos en el Estado español.1 En este nuevo informe se han mantenido los mismos criterios que en los informes anteriores con el objeto de facilitar una perspectiva sobre la evolución de la práctica de la tortura en este Estado. En este trabajo se presentan las denuncias que entran dentro de la definición de la Convención de la ONU:  Continue reading

Trato inhumano a una mujer presa enferma de cáncer

Celia, la pareja de Gelen Violeta Torrealba Hidalgo, nos ha hecho llegar una denuncia presentada por ella en junio de 2017 donde relata que Gelen ingresó en prisión preventiva en la cárcel de Málaga el 22 de mayo de 2015 siendo trasladada a la prisión de Córdoba, cuando se encontraba con síntomas de la enfermedad que luego le diagnosticarían. Examinada por el servicio médico de Córdoba le dijeron que no tenía nada, sin realizarle ningún tipo de prueba médica. Al insistir en que se encontraba mal ante los mismos servicios médicos, fue amenazada con ser trasladada de prisión.  Continue reading

Un preso enfermo de cáncer denuncia torturas en la cárcel de Teixeiro (A Coruña)

Por las redes sociales circula el siguiente fragmento de una carta de Pedro Escudero Gallardo, preso en aislamiento en la cárcel de Teixeiro, con una condena de larga duración y gravemente enfermo de cáncer, que denuncia haber recibido un trato a manos de carceleros de allí que no tiene un nombre más apropiado que el de tortura. No podemos dejar que pase esto en silencio total. Arriba, en el cartel están las señas del preso, para escribirle, y abajo del todo, ponemos el teléfono y fax de la cárcel y del juzgado de vigilancia penitenciaria competente, y un enlace al directorio de instituciones penitenciarias, para pedir cuentas a los responsables.  Continue reading

Torturas y tratos crueles, inhumanos y degradantes en la cárcel de Albocàsser (Castellón II)

Transcribimos fragmentos de dos cartas de una persona presa en la cárcel de Albocàsser (Castellón II) cuyo nombre callamos para evitarle represalias. En la primera, fechada el 26 de noviembre, denuncia que ha recibido una paliza de los funcionarios de esa prisión y que ese es un comportamiento habitual en ella.

A mí me han sucedido cosas que no las podrán creer si no saben. Acabo de salir ayer del módulo de aislamiento y los funcionarios abusan de poder, y lo más indignante es que el señor director don Carretero, responsable de este CP, no hace que dejen de hacer uso y abuso del mal trato a los presos. A mí me dieron una buena paliza, me pegaron patadas, puñetazos, codazos y pisotones hasta tenerme más de cinco minutos con el pie de un funcionario en mi cabeza y echando su peso sobre mí. He denunciado al juzgado de guardia de Castellón de la Plana. Pero da todo igual, hagas lo que hagas con referencia al juez, no dan credibilidad a nuestras palabras, pero es que ni aportando papeles. Son injustos y muy duros, por abuso de poder, que se les da un uniforme y ellos mandan. Así que estoy dispuesto a unirme a la lucha. Estoy preso desde el 95, que en esos años no pasaba esto, porque la unión hace la fuerza y si divides, has vencido.

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